Sesiones individuales y en pequeños grupos, adaptadas a las necesidades de cada alumno. Preparaciones personalizadas y control continuo del profesional.
La preparación física es una parte del entrenamiento que busca la mejor condición física posible de la persona, a fin de llegar a su máximo rendimiento deportivo y protegerla de posibles lesiones.
Para ello, se crea un plan con ejercicios progresivos que fortalecen los órganos y sistemas, y se trabajan aspectos como la fuerza, la velocidad o la resistencia, adaptando el cuerpo al nivel de exigencia y especialidad que se necesita, por ejemplo para una competición o para empezar un entrenamiento específico de un deporte.
En función de los objetivos, podemos hablar de preparación física general o específica de un deporte. Sea cual sea tu motivación, nuestro equipo especialista te ayudará a superarte día a día para llegar a tus metas.
Entrenamiento personal y en grupo.
Las lesiones son uno de los grandes miedos en el mundo del deporte y la actividad física. Conscientes de ello, en nuestro centro hemos creado un entrenamiento específico para prevenirlas reforzado las articulaciones, músculos y ligamentos, trabajando la flexibilidad, el equilibrio y la propiacepción para encarar tu práctica con seguridad y confianza.
Entrenamiento personal.
La readaptación deportiva es un proceso orientado a preparar a un/a deportista que ha sufrido alguna lesión para que pueda volver a su práctica de una forma segura lo antes posible.
Esta especialidad combina el conocimiento de la patología lesional, con el dominio de la preparación física para un deporte concreto, para crear un programa de trabajo específico para cada persona, y realizar un seguimiento esmerado que nos permita adaptarnos y hacer cambios según la evolución.
¡En nuestro centro, éste es uno de nuestros puntos fuertes! Tanto si eres deportista profesional como ocasional, podemos ayudarte a recuperarte y readaptarte de forma integral para volver a entrenar con la seguridad y confianza de salir fortalecido/a del proceso.
La fuerza es la capacidad motriz que, mejorándola, nos permite mejorar el resto: velocidad, resistencia, potencia… Es decir, que la fuerza es la base de todo entrenamiento.
Además, a nivel de salud, la comunidad científica da cada vez mayor importancia al entrenamiento de fuerza, recomendando incluir al menos dos sesiones de entrenamiento de fuerza a la semana por sus beneficios en todo el organismo: mejora el funcionamiento del metabolismo , la salud ósea, hormonal, cardiovascular, del sistema inmunológico y la mejora en la salud mental y la cognición.
En nuestros entrenamientos de fuerza creamos programas que se adaptan a tus necesidades, con distintos tipos de pesos y ejercicios funcionales, y controlamos todos los factores que harán que ganes bastante de forma progresiva, eficiente y segura.
Una sesión de trabajo orientada a la movilidad general del cuerpo y especialmente a la salud de nuestras articulaciones y ligamentos. Esta práctica nos ayuda a conocer mejor nuestro cuerpo, mejorando la coordinación y la postura, y evitando la rigidez articular para evitar lesiones y dolores, tanto en la vida diaria como en nuestros entrenamientos posteriores.
‘Hacer cardio’ no es sólo correr en una cinta o al aire libre. Esta actividad ofrece un entrenamiento variado y dinámico, con diferentes circuitos y ejercicios de cómo los ‘burpeas’, ‘jump squats’, o ‘mountain climbers’ que te harán quemar calorías, aumentar la masa muscular y mejorar tu resistencia cardiopulmonar sin aburrirte. ¡Y si eres un apasionado/a del running, esta actividad puede ser el complemento ideal para entrenar de una manera diferente!
Podríamos definir la agilidad como la capacidad de realizar movimientos concretos con rapidez y calidad. Este don es clave en los deportes de equipo como fútbol o baloncesto, porque nos permite adaptarnos a nuevas necesidades motoras como la aceleración y desaceleración, el cambio de dirección o escapar de oponentes, pero también tiene muchos beneficios en otros deportes y en la vida diaria.
En este entrenamiento desarrollaremos la agilidad trabajando las capacidades físicas, motrices y psicomotrices a través de juegos con cambios de ritmo y sentido, juegos de pelota, saltos, lanzamientos, equilibrios o salidas explosivas. ¡Sentirse y verse ágil no tiene precio!